La chía es un alimento milenario venerado desde tiempos precolombinos. Incomparable fuente de ácidos grasos esenciales, omega 3 y 6, proteína, antioxidantes y fibra. Una vez en contacto con el agua (1 cda. durante 5 a 10 min) se hidratará haciendo presencia de su «gel» (mucílago) activando sus propiedades funcionales.